El maridaje no es tan sencillo como parece, el tipo de carne, su preparación, salsas, entre otras cosas influyen en el vino que se va a escoger. A continuación te damos 5 opciones de nuestros platos con 5 vinos que maridan a la perfección.
Con ensalada de tomates confit, olivas marinadas y focaccia.
De intenso color amarillo con tonos sutiles “verde oliva”, de apariencia brillante. Aroma exquisito donde predominan los frutos tropicales, cítricos, coco y frutos secos. Una delicada y correcta acidez le otorga una sensación de frescura. Tiene un final terso y persistente.
Con puré de papas criollas,limón y vinagreta de vegetales.
Color amarillo, límpido y con destellos verdes. Tiene una gran intensidad en nariz, con notas a frutas como pera, durazno y ananá; además flores blancas, azahar y delicadas notas a cáscara de pan. En boca se aprecia un buen volumen y untuosidad; tiene una acidez vivaz. Es un vino elegante, perfumado con gran equilibrio y persistencia.
Acompañados de puré de papas y repollo a la cerveza negra con chimichurri de menta.
Color cereza con ribetes púrpura. Buqué intenso de fruta madura, como moras y arándanos, junto con cedro y especias. En boca es estructurado y equilibrado, con sabores concentrados de fruta madura y notas de especias. Final largo.
Color rojo intenso, con aromas minerales, balsámicos y especiados. En boca concentrada, grasa y con taninos marcados.
Es un intenso vino tinto rubí, con suaves reflejos de color malva y una fragancia característica que es intensa, agradablemente afrutada con toques de frutas del bosque, en particular mirtle y blackberry silvestres junto con un clásico y exclusivo sabor de trufa negra y cuero. Las fragancias picante encuentran la vainilla que viene del envejecimiento en madera. Deja un equilibrio perfecto de concentración y agrado, ya que el vino presenta una compleja gama de sabores balsámicos, un sabor seco lleno de carácter y con un ligero toque de almendra. Los taninos le dan una textura aterciopelada y una estructura sólida y compacta.